Este blog está dedicado a las series de televisón americanas. Cancelaciones, audiencias, cambios... todo lo que concierne al mundo de la ficción estadounidense en la pequeña pantalla en Estados Unidos y España

sábado, 23 de junio de 2007

El final de Stargate

Sniiffff, no quería que acabara, aunque todo tiene su final. He leído en Pizquita cómo termina Stargate y es.... triste, muy triste. Quedan dos películas, que me tendré que bajar, pero aún así, no me gusta el final, hubiera preferido otra forma (aunque siempre queda la posibilidad de que sea mentira, y el spoiler sea falso!!!)
Adios a una de mis series preferidas de siempre y una de las grandes de ciencia-ficción, por la que nadie dió un duro al principio, hace ya diez años. Quedan Atlantis y el segundo spin-off que anunciaron hace poco.
Pero yo estoy triste.... :_(
PD: Para las de Las Chicas Gilmore, esto es aún más traumático, sino id a ver el spoiler, ya veréis cómo es así
Editado el 24 de junio a las 14:35 (minuto arriba, minuto abajo): Mejor me ahorro los calificativos negativos para el/la de Pizquita, porque algo me dice que no ha visto el capítulo. Después de hacer una previsualización en el Ares, rectifico. Qué finaaaaal!!! Pero aún me queda por verlo entero. Sigo con un poco de trauma, pero no tanto como antes.

martes, 5 de junio de 2007

Razones por las que amo/odio Lost

Dándome un paseo por el blog que Nacho Vigalondo tiene en El País, he decidido copiarle (hasta cierto punto) y poner mis razones por las que adoro y detesto a partes iguales esta serie que nos lleva por el camino de la amargura a todos los incautos que empezamos a verla. No voy a dedicar tres posts diferentes, así que tranquilidad. Aquí van, y no tienen spoilers.

Amo a Lost por:

- El casting. Equilibrado y solvente. Normalmente, actúa bien y me suelo creer los personajes. Además, y a riesgo de parecer frívola, están todos buenísimos. Sobre todo la sección masculina, destacando a Sayid y Jack, y ¡además ahora está Rodrigo Santoro!

- Las pajas mentales de los guionistas. Impagables. Desde el asunto del sistema de alerta de la Isla hasta el oso polar. Es que me encantan.

- Los finales. Da igual que sean de episodio o de temporada. El caso es que consiguen entusiasmarte y hacerte mil preguntas sobre lo que pasará luego. Normalmente, vienen derivados de las pajas mentales de los guionistas.

- La posible coincidencia con la realidad. Básicamente, subirme a un avión y empezar a buscar a los guapos y catalogarles: el médico, el broncas, la fugitiva.... (Ilusión, todo ilusión, pero lo que entretiene cuando estás esperando a que la señora de turno ponga el equipaje en su sitio...)

Y odio a Lost por:

- El casting. Lo admito, jamás tragaré a Kate. Y francamente, ¿cuáles son las posibilidades de encontrar un vuelo lleno de macizos como ese?. Ah, y Jack llora de pena.

- Las pajas mentales de los guionistas. A veces creo que nos toman por gilipollas. Vale, es una serie de ciencia-ficcion/fantasía, pero se pasan. Los dos ejemplos puestos antes, sobre todo el del oso polar, han sido de traca...

- Los finales. Frustración. Esa es la palabra. Y los continuos "ein" que suenan cuando veo esto.

- La posible coincidencia con la realidad. Supongo que no hace mucha falta que discuta esto.

De momento, eso. Si se me ocurren más cosas, las iré anotando. Animo al lector o lecora a que haga lo mismo y se desahogue.

lunes, 4 de junio de 2007

La temporada acabó III: Héroes

Lo primero es lo primero. Si no has visto el final de Héroes y no quieres un destripe, lo mejor que puedes hacer es irte de este sitio ahora. Si tienes curiosidad morbosa, tú mism@.

No quería llegar a esto, pero la impaciencia pudo conmigo y el sábado terminé de ver la temporada vía web. Y lo mejor que puedo decir es que ni fu ni fa. Lo sé, lo sé, no es una expresión muy académica, pero es la pura verdad. Creo que todo el mundo esperaba un final apoteósico (sobre todo después de un episodio como Five years gone) y se quedó en un capítulo más bien descafeinado.

Supongo que la mayoría esperaba una lucha estilo Bola de Dragón entre Peter "Radioactivo man" Petrelli y el villano más atractivo de la televisión de los últimos años, Sylar, que adquirió los poderes después de descerebrar a Ted. La cosa se quedó en un par de bofetadas y una escena más bien tirando a sonrojante en la que Hiro atraviesa a Sylar con su espada. ¿Y por qué sonrojante? Bueno, si tenemos en cuenta que el malo de la mirada intensa es capaz de notar los latidos de la gente y de mover un furgón policial con la mente, no se explica que no vea o note a Nicky (aaaaarrggh no la soporto) cuando le arrea con un parquímetro (¿por qué me acuerdo del alcalde de Madrid en este momento?) y luego no se dé cuenta de que Hiro, que no es precisamente rápido, va hacia él con una espada. Justo antes había tenido lugar otra escena igual de vergonzosa con el agente Parkman disparando a Sylar. Ejem, querido Parkman, recuerda que el tipo para objetos con la mente y tal. Haber hablado antes con Mohinder, quién por cierto, mira que tardó en darse cuenta de que el tipo con el que colaboraba era el malo. Muy inteligente, sí. Pero listo, lo que se dice listo... Todo esto fue rematado por Nathan Petrelli, que decidió llevarse a su hermano volando para que no estallase en medio de una Nueva York vacía (ciencia-ficción, y de la buena). Lo curioso es que el ex-novio de Rory Gilmore hace "boom" en el cielo, lo que supongo a la larga será peor que la explosión nuclear. Se ahorran todo el asunto de la muerte en masa, pero ¿qué pasa con la lluvia radiactiva?, cómo se ha comentado en foros, blogs y otros sitios.

De testigos, la animadora y su padre adoptivo. Me sorprende que la pobre Claire no haya desarrollado un trauma brutal después de todo lo que ha pasado, con el asunto de la familia biológica y tal, y lo peor, con el descubrimiento de una abuela que parece una mala de Disney, a lo La Cenicienta. Por si fuera poco, la química que tiene con tío Peter es impresionante, qué lástima que no puedan ser pareja (aunque siempre quedan los fan fics, y no se os ocurra llamarme pervertida ni nada por el estilo, cosas más raras se ven en la vida real). También pululaban por allí la rubia que se desdobla, su marido que atraviesa paredes, el hijo que manipula cualquier aparato y una niña, protegida de Mohinder, que nos anuncia un malo todavía peor que Sylar (que por cierto, no muere). Isaac la palmó tal y como predijo, y Linderman, al que tanta importancia se le ha dado, fallece sin mucha complicación, en una escena que da bastante asquito. Al final, vemos a Hiro en la Edad Media japonesa, y en medio de una batalla, lo que habla del poco sentido de la oportunidad (o mucho, según se mire) que tiene el personaje.

Todo esto, para cerrar una temporada que ha crecido por momentos, hasta llegar al final, claro. Aún así, recordemos que es el "Volumen 1", pero a ver qué tal es el "Volumen 2", con la mitad del casting pendiendo de un hilo (o eso han querido dar a entender), aunque sé que Sylar ha sido confirmado. Hasta entonces, hay que esperar cuatro meses, o verse la temporada entera otra vez.

Y dos dudas que me corroen, ¿que fue de la mascota de Souresh Padre? ¿Y de Bigotitos?.

viernes, 1 de junio de 2007

Esos maravillosos anuncios

Vale, este post no va exactamente de series, pero, seamos francos ¿alguien conoce un blog sin algún off-topic? Son pocos. Y si no conocéis ninguno, me da igual, ya sabéis de uno.
Este post va de anuncios. De anuncios de coches, para ser más exactos. No contentos con ponernos los anuncios de BMW, esos de "¿Te gusta conducir?" que no entiende casi nadie, nos ponen los de Renault, que son dañinos para la vista, el oido, los sentidos en general y la salud mental de todo aquel que tiene la desgracia de verlos.
Creo firmemente que han desbancado a los de BMW. ¿Alguien se los creyó? Quiero decir, nadie en su sano juicio se tragaría la idea de que los conductores de BMW circulan bien y además dejan circular bien a los demás. Todo eso acompañado de un aire de tranquilidad y misticismo en plan conducción chill-out. Sé esto por experiencia. Muchos diréis que eso no es verdad y acompañaréis la frase con un "mi padre (o algún conocido) conduce un BMW". No estoy diciendo que todos los que conducen este tipo de coches sean unos impresentables al volante, pero una gran mayoría es especialmente irritante.
No obstante, me veo obligada a hablar de unos estupendos anuncios, también de BMW. En realidad, no son anuncios en sí. Son cortos protagonizados por Clive Owen y dirigidos por gente como Guy Ritchie, John Woo o Tony Scott. Los secundarios también son para tener en cuenta: Gary Oldman, Madonna, Don Cheaddle o James Brown. Los lanzaron en 2001 y son casi imposibles de conseguir. No obstante, se pueden encontrar en You Tube (como casi siempre). Os dejo Star, en el que sale Madonna.
Pero bueno, a lo que realmente iba. Los anuncios de Renault. ¿Los habéis visto verdad? He estado a punto de ponerlos en un enlace y no despotricar en este post, mostrándoos el horror, pero no me he atrevido. No sólo joden una canción de mi infancia como la de La Historia Interminable (que sí, lo sé, no es precisamente buena) si no que además, plantean unas situaciones que, aparte de ridículas, resultan hasta un punto ofensivas. Estoy hablando de la escena de las ciclistas que distraen. No pretendo ponerme en plan feminista radical, pero no sé muy bien a qué viene. Lo del piano, ya ni hablamos. Hay otro anuncio, no me acuerdo de qué va, y no quiero averiguarlo. Con uno me basta y me sobra. (¿Sabéis qué? Que me lo he pensado mejor. Aquí tenéis uno, que además es ese otro que no sé de qué iba. Soy cruel, lo sé).
Seguramente son unos ejemplos un tanto extremistas. Los anuncios de coches no se distinguen precisamente por su calidad, pero es que estos son especialmente insufribles. Y hay más, como los de compresas (de mis preferidos), pero es un tema que se puede abordar en más entradas.